

Círculo Maternal Ser Mamá
¿Has oído hablar de las "tiendas rojas"?
Eran unos espacios donde se reunían niñas, mujeres y ancianas y se reconocían , honraban y recuperaban la conexión con su ser cíclico en sincronía con la Naturaleza..
Allí se compartían los saberes ancestrales o misterios femeninos.
Solían hacerlo en luna nueva y luna llena, alrededor de un fuego sagrado.
Las mujeres se sentaban en círculos, descansaban, se dedicaban a su autocuidado y transmitían su sabiduría entre ellas.
Con el paso del tiempo estos espacios se han ido perdiendo debido a toda una transformación social que ha conducido a la prevalencia de las energías masculinas (y esto no tiene nada que ver con el género).
El Círculo Maternal "Ser Mamá" recupera para ti uno de esos espacios sagrados de sabiduría femenina dedicado a las mujeres que, como tú, están viviendo su maternidad, desde el embarazo, para poder reconectar con tu poder femenino, el que necesitas para maternar a tus hijos.
Y desde ahí, desde la unión de las energías masculinas y femeninas poder cambiar el mundo a través de tu maternidad.
¿Qué encuentras en el Circulo Maternal Ser Mamá?
Espacio de no juicio donde compartir desde el amor y el respeto, donde escucharte y sentirte parte de una red amorosa de mujeres que, como tú, viven la maternidad con entrega y pregunas
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Encuentros mensuales
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Modalidad presencial o/y online
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Espacio de ...
"Cuando Chon me habló de los círculos vi la oportunidad de ‘prepararme’ de una forma diferente de cara a afrontar mi nueva maternidad, todo lo que conocía hasta la fecha solo se enfocaba en la parte fisiológica y los círculos englobaban el conjunto.. además en donde lo principal era yo para proyectarlo hacia los demás. Para mi era algo muy nuevo, lo dibujé en mi cabeza como una especie de grupo de apoyo… me quedé con las palabras maternidad holística del cartel. Los círculos me han aportado una nueva red de apoyo, una tribu, mujeres con diferentes luchas internas pero con maternidades preciosas en diferentes momentos vitales,al escuchar sus relatos me han enriquecido en mi propio autoconocimento. Me activaron mi Diosa interna, me repito constantemente lo poderosa que soy y la conexión con mi naturaleza."
Angela
"Fui a ver a la matrona y vi el cartel. Llevaba 1 mes de posparto y me sentía perdida, no me encontraba a mí misma en todas las emociones que sentía y no estaba conectando con el bebé. Nadie te dice que esto puede ocurrir y en el fondo da miedo verbalizarlo porque te sientes juzgada (por todo el mundo e incluso por ti misma). Creo que necesitaba estar con otras mamis que estuvieran pasando lo mismo que yo. en realidad pensaba que me iban a dar consejos sin parar como los que ya recibía, pero lo que yo quería era encontrar a alguien que se sintiera igual que yo, porque pensaba que era la peor madre del mundo por no poder conectar con mi bebé, por estar agotada, por sentirme enfadada con mi pareja por ver que mi vida estaba patas arriba y él seguía prácticamente igual...en conclusión yo buscaba comprensión. El círculo me ha aportado muchas cosas y ha ido variando a lo largo del tiempo. El primero fue increíble, me aportó serenidad y la comprensión que yo esperaba ... poco a poco, el resto de círculos me han dado confianza en mi misma, en mi instinto, fortaleza, autoestima... y me han ayudado a verme como la mami que yo quiero ser y a sentirme agradecida y afortunada. De los círculos siempre salgo sintiéndome una super mujer... es como un chute de fortaleza y gratitud. Llego a casa y me siento más unida a mi bebé, me siento fuerte mentalmente ante las adversidades del día a día y me siento reconfortada"
Lidia
"Lo que me llevó a acudir a los círculos fue la necesidad, un poco desesperada, de encontrar un espacio seguro donde sentirme yo misma y poder abrirme con otras madres que pudieran entender mejor mis emociones de los últimos meses tras haberme convertido en mamá. Deseaba sentirme comprendida y valorada, cosa que yo no estaba haciendo conmigo misma. El círculo me ha aportado muchísimo, acompañamiento, escucha, mucho apoyo y sentir el cariño y la comprensión de otras mujeres madres. Me sorprendió mucho desde el principio el planteamiento de los círculos, las velas, la intención, las cartas... me encantó. Me llevo muchísimo amor, que se respiraba en el ambiente de madres deseosas de ser comprendidas y a su vez desbordadas de amor por sus pequeños y desbordadas de emociones como, en mi caso, no terminaban de comprender pero que poco a poco van cobrando un sentido. Me llevo esta experiencia tan bonita donde he sentido que podía ser yo misma y que no se me iba a juzgar" (2024) Resumiría mi paso por los círculos de maternidad con la palabra: transformadores. Cada día me doy más cuenta de la enorme transformación que sufre una mujer en todos los sentidos tras convertirse en mamá, lo que me recuerda otra palabra: compasión, esa que tanto he necesitado en tantas ocasiones y ni yo misma me creía. Porque esa transformación debe o necesita ser comprendida y acompañada y no se me ocurriría un sitio mejor que los círculos para transitar y compartir la infinidad de matices que vivimos las madres y honrar la maternidad en sí misma con sus luces y sus sombras. Me he sentido acompañada, agradecida e inspirada por las maravillosas mujeres que forman los círculos. Gracias por hacer esto posible Chon Ah y gracias por ayudarme en el camino de encontrar mi equilibrio y volver a mi “centro”, ese que no sabía si sería capaz de volver a encontrar ❤️ La gratitud es algo que tengo ahora muy presente y en parte sé que es gracias a la experiencia en los círculos. (2025)
Adriana
En un desayuno de maternidad de la matrona Nazaret Oliveira (comadronaenlaola), conocí a Isabel que me habló de los círculos. Siendo madre primeriza de un bebé de dos meses y siendo la primera de todas mis amigas en ser mamá, sentía que me faltaba algo, me sentía bastante sola... La expresión "sola rodeada de gente" me iba al pelo... Era como que tenía mucha gente a mí alrededor pero me sentía incomprendida, no tenía con quien compartir mis dificultades de lactancia y la montaña rusa emocional que estaba viviendo. Sentía que todo el mundo a mí alrededor me juzgaba o consideraba que mis problemas eran tonterías. Al pensar en un circulo de maternidad me vino a la mente la idea de tribu que tan necesaria considero, pensé que era justo lo que necesitaba. ¡No me equivocaba! Por cuestiones organizativas solo he podido ir a 3 círculos, pero me han fascinado. De hecho, estoy deseando que vuelvan a empezar . Me llevo paz, calma, sensación de que todo está bien y que no estoy sola. Me llevo la sensación de maternar en comunidad y de ver a otras mujeres haciéndolo.
Amalia
Al círculo me llevó en primer lugar tú 🙂 y la necesidad/deseo de tener cierta “tribu” Lo he vivido como una respuesta general de naturalidad y normalidad a muchas cuestiones sobre la maternidad y sobre mi Me llevo paz equilibrio y un sentimiento de “normalidad” sobre mi vida actual.
Vero
La curiosidad me despertó interés de un espacio en el que pudiese encajar al haber cambio y ahora ser mamá, cuando pregunte y me dijeron que podía ir al círculo con la peque sentí alivia de poder empezar desde ya ha hacer cosas las dos juntas. Me hubiese encantado poder asistir antes y haberme integrado más... pero los dos dias que fuimos me encantó, el sentir que no soy yo sola la que tiene dias buenos o malos en esta etapa bonita pero dura. Me llevo muy buen recuerdo y momentos especiales y las ganas de que vuelva a empezar y poder asistir.
Bea
Los círculos de maternidad guiados por Chon para mi son un oasis de paz en medio del desierto que supone la maternidad y el día a día. Es mi lugar seguro donde no me siento juzgada sino arropada y escuchada. Donde aprendo de la sabiduría de Chon y del resto de las mujeres que formamos este círculo de amor, sabiduría y generosidad. No puedo más que agradecer que Chon se cruzara en mi camino y me descubriera lo fuertes y poderosas que somos, incluso en nuestros momentos más oscuros somos luz y amor
Deborah
Asistir al círculo de maternidad ha sido una experiencia profundamente reveladora para mí. En un momento en el que la maternidad puede sentirse cuesta arriba o solitaria, encontré en este espacio un refugio cálido, lleno de escucha, comprensión y conexión real. Chon, con su presencia amorosa y su sabiduría serena, guía cada encuentro con una sensibilidad que te toca el alma. Sus dinámicas son auténticos regalos que nos invitan a parar, sentir y compartir sin juicio y a recolectar con nosotras mismas y con otras madre. Solo tengo palabras de gratitud hacia Chon por tejer esta bonita red de apoyo que nos sostiene a todas las mamas que tenamos la suerte de poder participaren estos benditos circulos.
Lucía
Chon me habló de él en la revisión del primer mes de mi tercer bebé. Fui sin saber muy bien qué y como sería, pero me sentí tan bien al salir, tan recargada de energía, tan en calma.. que desde que lo probé no quise perderme ninguno. Para mi ha sido como un pulmón en esta tercera maternidad. Mi (nuestro) ratito de compartir con otras mamis y bebés, y por supuesto con Chon, la luz que hace posible todo esto. Me llevo, además de esos ratitos, herramientas para poder gestionar algunas situaciones familiares, he aprendido a tener compasión conmigo misma, a escucharme y no ir siempre a la carreta, y a tener presente que Yo Elijo. Gracias por hacerlo posible 🩷
Andrea
Lo que me trajo al Círculo de maternidad fue la experiencia de mi amiga Andrea, quedamos a las dos semanas de nacer mi segundo hijo y me dijo, “he ido a un círculo de maternidad y te encantaría, es así muy tú, muy de energías, un lugar donde compartir experiencias, no sé cómo explicarlo, pero te encantaría, voy a preguntar si puedes venir” y afortunadamente había hueco para mí. Fui a ciegas, si Andrea lo recomendaba desde el corazón, era bueno seguro. Para mí ha sido desde el momento uno un lugar seguro donde poder compartir mis sentimientos más profundos como madre y como mujer. Es un lugar donde se respira energía, serenidad y bienestar. Un lugar donde meditar, reír y llorar. Un lugar donde compartir la maternidad cobra el sentido más puro. Donde la frase “escuchamos no juzgamos” es real, tanto que yo diría “escuchamos y maternamos” Días antes del círculo empiezo a sentir una agitación muy especial, al aparcar cerca del edificio hasta cambia la respiración y al llegar y ver a Chon sonreír todo se coloca y empezamos a vibrar todas en la misma sintonía. Si alguien me pregunta por qué o para qué ir al Círculo, la respuesta sería, para estar mejor y así dar lo mejor de mí como madre. Si tuviera que describirlo con pocas palabras serían; energía, serenidad y bienestar.
Rosa
Mi maternidad comenzó con mucho miedo y también mucha soledad. Asi que cuando me hablaron del circulo no dudé en ir. Aun recuerdo el primero. Donde Chon nos énvitó a mirar a nuestros hijos y reirnos con ellos. Mi niño aun no sonreía (tiene sd. Down) y apenas me miraba. Asi que cuando Chon nos pregunto cómo nos sentíamos, por primera vez pude decir que estaba triste, muy triste. Y pude llorar. Cosa que apenas había hecho hasta entonces. Pude expresar ese dolor y también el miedo... Ese momento fue un punto de inflexión en mi maternidad. Pues desde ese momento pude mirar a mi hijo con otros ojos y sentirme una madre más, con las mismas preocupaciones que todas. Por supuesto que esas preocupaciones siguen estando, pero son mucho más llevaderas cuando una se siente acompañada y escuchada sin juicios. Y el círculo es uno de esos espacios seguros, en los que puedo docir aquello que me pesa y soltar. Gracias, Chon, por crear un espacio tan maravilloso.
Olga



