top of page

Ser mamá

Ser mamá es uno de los mayores cambios que se producen en la vida de una mujer.

Cuando te conviertes en mamá, te conviertes también en el sostén de tu hijo. 

Lo haces con todo el amor y la delicadeza del mundo, como sostienes una delicada flor entre tus manos tratando de cuidarla y que no pierda sus pétalos.

Las mamás podemos con todo lo que nos echen, porque para eso somos mamás o, mejor dicho, supermamás. O, al menos, eso creemos y eso creen los demás también, porque eso es lo que se suele esperar de nosotras.

Pero quizá te puedas preguntar "¿quién me sostiene a mí?". 

Y no lo digo porque necesitemos de alguien para transitar esta etapa vital (aunque todo lo que se pueda compartir puede estar genial). 

En ocasiones te puedes sentir sola (yo misma me sentí así y se lo he oído decir a otras muchas mamás).

Quizá seamos nosotras mismas quienes nos podamos cuidar con esa delicadeza y  ese mismo amor que damos a nuestro hijo y así sostenernos.

Al embarcarnos en el viaje de la maternidad también lo hacemos, la mayoría de las veces sin saberlo, en un viaje alucinante de transformación interior. 

La maternidad nos da la oportunidad de re-conocernos, de conectar con nosotras mismas (y con esa niña que llevamos dentro) y con nuestros hijos desde nuestra auténtica esencia. Somos seres de Luz y Amor. 

Yo lo estoy viviendo así, aunque me di cuenta de ello, fui consciente,  cuando mis hijos ya eran más mayores. 

Por eso, he decidido crear los Círculos maternales Ser Mamá y, desde aquí, quiero invitarte  a que participes en ellos.

Son un espacio para conectar contigo misma y con tu bebé y también con otras mamás como tú, reconociendo toda la sabiduría femenina que ya existe en todas y cada una de nosotras.

Son un lugar de encuentro seguro, respetuoso y amable que te invita a aprender a cuidarte, sostenerte, quererte para disfrutar realmente de tu maternidad, para vivirla de forma más consciente.

Y hacerlo desde el momento en que te sientes mamá (y no esperar a que tus hijos sean mayores). 

En ocasiones puede no ser un camino fácil porque a veces te tienes que enfrentar con partes de ti que no te gustan y no quieres ver. Pero estarás acompañada.

Te invito a vivenciar los círculos para que puedas decidir mejor desde tu propia experiencia. Luego tú serás quien decida si te resuenan o los dejas pasar.

Deseo poder verte dentro. 

Un abrazo enorme de Luz y Amor.

bottom of page